Brixton Venture Lab ha actualizado recientemente su exhaustivo mapa del ecosistema de agrotecnología y tecnología alimentaria en la América Latina y el Caribe de habla hispana.
Este mapa destaca las empresas que aportan soluciones innovadoras destinadas a crear sistemas agroalimentarios más sostenibles, inclusivos y resilientes. Redefine cómo se producen, distribuyen y consumen los alimentos en toda la región.
El ecosistema incluye ahora 618 empresas de 20 países, de las que el 80% se encuentran en Argentina, México, Chile y Colombia. Predominan las categorías de “Sistemas e IoT para el Sector Agrícola” y “Salud y Biotecnología Agrícola”, que representan el 63% del total de empresas. En particular, “Bebidas y proteínas alternativas” tiene una cuota significativa del 8%, con México y Chile a la cabeza, lo que indica una oportunidad de crecimiento potencial para el sector foodtech.
Con la creciente demanda mundial de alimentos impulsada por el crecimiento demográfico, el sector agrícola se encuentra en un estado constante de adaptación y cambio. América Latina desempeña un papel fundamental en esta dinámica, siendo el principal exportador neto de productos agroalimentarios del mundo. Sin embargo, la región se enfrenta a importantes retos, como la necesidad de adaptarse a los avances tecnológicos, el cambio climático y las preocupaciones por la seguridad alimentaria.
En medio de estos retos, las empresas emergentes de agrotecnología y tecnología alimentaria son fundamentales para garantizar el suministro de alimentos de la región y del mundo. Estas empresas emplean la tecnología para mejorar los sistemas agrícolas, desde la inteligencia artificial hasta las prácticas sostenibles, promoviendo sistemas más sostenibles, inclusivos y resilientes.
Estrategias financieras para la tecnología agroalimentaria en LATAM
Dados los reducidos niveles de inversión en 2023, las empresas agroalimentarias de LATAM deben explorar fuentes de financiación alternativas, como subvenciones públicas, asociaciones estratégicas y financiación mediante deuda. Hacer hincapié en las operaciones ajustadas y la asignación eficiente de recursos puede ayudar a estirar más el capital disponible, garantizando el crecimiento a pesar de las limitaciones financieras.
Para atraer capital riesgo, las empresas emergentes de tecnología agroalimentaria deben centrarse en parámetros financieros clave, como el crecimiento de los ingresos, los márgenes brutos, la relación entre el CAC y el LTV, el tamaño del mercado y la economía unitaria. Estas métricas proporcionan a los inversores información sobre el potencial de crecimiento, la rentabilidad y la escalabilidad de la startup.
Garantizar la eficiencia del capital al tiempo que se amplían las operaciones puede lograrse aprovechando la tecnología, optimizando los procesos y centrándose en las áreas de alto impacto. Mantener un enfoque ajustado, supervisar de cerca los indicadores clave de rendimiento e invertir en prácticas sostenibles puede maximizar el uso del capital e impulsar el crecimiento a largo plazo.
Oportunidades de mercado e impulsores del crecimiento
Entrar en nuevos mercados dentro de LATAM requiere un estudio de mercado exhaustivo para comprender la dinámica local, las preferencias de los consumidores y los entornos normativos. Formar asociaciones estratégicas con las partes interesadas locales, como agricultores, distribuidores o agencias gubernamentales, puede ayudar a sortear los obstáculos normativos y obtener información sobre el mercado. Utilizar plataformas digitales y canales de comercio electrónico puede facilitar el acceso al mercado y permitir una distribución eficaz. Adaptar los productos o servicios a las necesidades locales y centrarse en la sostenibilidad y la innovación es crucial para penetrar con éxito en el mercado.
El crecimiento de la “Biotecnología sanitaria y agrícola” está impulsado por la creciente demanda de prácticas agrícolas sostenibles, un mayor rendimiento de las cosechas y una mayor seguridad alimentaria. Los avances en biotecnología, incluida la ingeniería genética y la agricultura de precisión, permiten a los agricultores aumentar la productividad al tiempo que minimizan el impacto medioambiental. La creciente concienciación de los consumidores y el apoyo normativo a las soluciones biotecnológicas impulsan aún más el crecimiento de este segmento.
Del mismo modo, el crecimiento de los “Sistemas e IoT para el sector agrícola” se ve impulsado por la necesidad de aumentar la eficiencia, la productividad y la sostenibilidad. Las tecnologías IoT, como sensores, drones y plataformas de análisis de datos, permiten a los agricultores controlar y gestionar las operaciones en tiempo real, optimizar el uso de los recursos y tomar decisiones basadas en datos. La disminución de los costes de los dispositivos IoT, la expansión de la conectividad a Internet y las políticas gubernamentales de apoyo contribuyen a la rápida adopción de estas tecnologías.
Innovaciones disruptivas y tendencias futuras
Varias innovaciones disruptivas van a tener un impacto significativo en la industria agroalimentaria. La agricultura vertical y las tecnologías de agricultura de interior permiten la producción de cultivos durante todo el año en entornos controlados, reduciendo el consumo de agua, la ocupación del suelo y los costes de transporte. La agricultura celular y la carne cultivada en laboratorio ofrecen alternativas sostenibles a la agricultura animal tradicional, abordando las preocupaciones relacionadas con el bienestar animal, la degradación medioambiental y la seguridad alimentaria.
La tecnología Blockchain mejora la transparencia y la trazabilidad en la cadena de suministro agroalimentaria, permitiendo a los consumidores seguir la pista de los productos alimentarios desde la granja hasta el tenedor. La IA y el análisis predictivo permiten a los agricultores optimizar las prácticas de gestión de los cultivos, predecir las fluctuaciones del rendimiento y mitigar los riesgos asociados al cambio climático y los brotes de plagas.
Retos y estrategias para el éxito
Lograr una mayor penetración en el mercado de la tecnología agroalimentaria en LATAM se enfrenta a varias barreras. Los obstáculos normativos debidos a regulaciones complejas e incoherentes entre países pueden dificultar la entrada en el mercado. Es crucial colaborar con los responsables políticos para racionalizar la normativa y garantizar su cumplimiento. Las infraestructuras inadecuadas, como la conectividad limitada a Internet y las redes de transporte, pueden impedir el acceso al mercado. Invertir en el desarrollo de infraestructuras y aprovechar la tecnología móvil puede ayudar a superar estas barreras.
El acceso limitado a la financiación es otro reto. Fomentar la inversión mediante incentivos gubernamentales, redes de capital riesgo e inversores de impacto puede aliviar esta barrera. Además, la concienciación y la educación de los consumidores son vitales. Las empresas deben centrarse en educar a los consumidores sobre los beneficios de las soluciones agroalimentarias mediante campañas de marketing específicas, demostraciones y asociaciones con las comunidades locales y las ONG.
Las prácticas agrícolas tradicionales profundamente arraigadas pueden resistirse a la adopción tecnológica. Impartir formación, demostrar los beneficios económicos y medioambientales de las soluciones agroalimentarias y fomentar la colaboración con los agricultores locales puede ayudar a superar esta barrera.
Criterios de inversión y gestión de riesgos
Al evaluar las empresas emergentes de tecnología agroalimentaria para la inversión, se tienen en cuenta varios criterios clave. El potencial de mercado se evalúa examinando factores como las tendencias demográficas, la demanda de alimentos y el panorama competitivo. La innovación tecnológica de la startup se examina por su singularidad, escalabilidad y potencial para alterar las prácticas agrícolas tradicionales. También es fundamental la experiencia del equipo fundador, que busca un profundo conocimiento del sector y la capacidad de ejecutar eficazmente el plan de negocio.
Se revisa cuidadosamente la tracción del negocio, incluida la captación de clientes, la generación de ingresos y los logros de hitos. También se evalúan el impacto social y medioambiental, los riesgos normativos y operativos, y las posibles oportunidades de salida, para calibrar la viabilidad y escalabilidad a largo plazo de la startup.
Gestionar los riesgos asociados a la implantación tecnológica y la volatilidad del mercado implica diversificar la oferta de productos y la base de clientes. Es crucial implantar sólidas medidas de ciberseguridad para proteger los datos y sistemas sensibles. Realizar evaluaciones exhaustivas de los riesgos, desarrollar planes de contingencia y mantener relaciones sólidas con proveedores y socios ayuda a mitigar los riesgos operativos. El seguimiento proactivo de las tendencias del mercado y la adaptación de las estrategias empresariales permiten a las empresas responder eficazmente a la volatilidad del mercado.
El camino por recorrer
El mapeo de Brixton Venture Lab identifica 618 empresas de tecnología agroalimentaria en la América Latina y el Caribe de habla hispana. Este ecosistema, enriquecido por la innovación tecnológica y el compromiso con la sostenibilidad, está preparado para un crecimiento significativo. La atención continua a las innovaciones disruptivas, las asociaciones estratégicas y la gestión eficaz de los riesgos garantizarán que estas empresas puedan sortear los retos y aprovechar las oportunidades en el cambiante panorama de la tecnología agroalimentaria.
Para quienes estén interesados en más detalles o en posibles colaboraciones, Brixton Venture Lab invita a realizar consultas y a comprometerse a explorar el dinámico mundo de la tecnología agroalimentaria.
Consulta el informe completo en el sitio web de Brixton Ventures