Agrotech brasileña, Pink Farms, recauda R$ 2millones, planea fábrica nueva

Contxto – Pink Farms es una startup brasileña de agricultura vertical urbana con sede en São Paulo. Con la participación de SP Ventures y Capital Lab, Agrotech acaba de recaudar R$2 millones (aproximadamente US$533,000) para aumentar su producción alimentada por tecnología.

En resumen

Como una de las primeras granjas urbanas de América Latina, Pink Farms utiliza medios sostenibles para producir alimentos nutritivos. El ciclo de producción de vegetales limpios se realiza en interiores con 100% de iluminación artificial, estructuras verticales y la tecnología más nueva.

El nuevo capital se destinará a la construcción de su primera fábrica a gran escala para servir mejor a São Paulo. La startup también planea introducir nuevos productos como fresas y tomates en su cartera. Asimismo, continuará mejorando su tecnología a través de más investigación y desarrollo.

“Los consumidores buscan cada vez más productos con mayor calidad y en organizaciones preocupadas por el medio ambiente”, dijo Francisco Jardim, socio fundador de SP Ventures. “Por lo tanto, analizamos las propuestas de Pink Farms y decidimos invertir en su desarrollo”.

A fondo

Para ser exactos, la agricultura vertical se refiere a la práctica de cultivar produtos en capas apiladas verticalmente. Es particularmente útil en áreas con tierra limitada, haciendo que las ciudades sean lugares ideales para implementar estas prácticas usando métodos de cultivo de suelo, hidropónicos o aeropónicos.

SP Ventures afirma que el método de cultivo vertical urbano de Pink Farm es 100 veces más productivo que los cultivos en campo abierto. Esto se debe específicamente a su uso de estructuras multinivel. Con esto, los productores pueden controlar mejor la temperatura, la humedad y el control de calidad del aire.

Este proceso no solo es más eficiente sino también más ecológico. Por ejemplo, los agroquímicos no son necesarios con la agricultura urbana. Aún más, reduce el consumo de agua hasta en un 95 por ciento y el uso de fertilizantes en un 50 por ciento.

Los fundadores de Pink Farm querían originalmente lanzar la compañía en función de su lucha por encontrar productos de calidad en Brasil.

“Al observar el mercado y la cadena de producción de vegetales en Brasil, tuvimos sorpresas muy negativas, principalmente debido a la baja eficiencia de la cadena con pérdidas posteriores a la cosecha de hasta el 40 por ciento”, dijo Geraldo Maia, cofundador de Pink Farms, quien creó La compañía en 2016 con los hermanos Mateus y Rafael Delalibera. “Es decir, de cada 100 kilos de comestibles (nosotros) solo consumimos 60 kilos”.

Incluso hay beneficios de logística.

“También utilizamos el concepto de la granja a la mesa para reducir el número de intermediarios, el tiempo, las pérdidas y el impacto generado en la cadena, siempre brindando un producto mucho más fresco a los consumidores”, agregó Maia.

“Es posible que el producto se consuma el día en que se cosechó, lo que elimina las pérdidas posteriores a la cosecha y aumenta la vida útil en más del 100 por ciento”.

¡Definitivamente agregaremos a Pink Farms a nuestro mapa de mercado de foodtech!