Recientemente, cuatro startups chilenas de pueblos originarios hicieron una aparición notable en el «World Indigenous Business Forum» en Port Moresby, Papúa Nueva Guinea. Este evento anual congregó a representantes de negocios indígenas de 13 países, y la delegación chilena, patrocinada por ProChile, se destacó como la única representante de América Latina.
Alejandra Antilef, coordinadora nacional de Pueblos Originarios de ProChile, resaltó la importancia de esta participación, señalando que no solo integraba a los pueblos originarios chilenos en el comercio internacional, sino que también les ofrecía un espacio vital para el intercambio de experiencias y prácticas comerciales que respetan sus tradiciones ancestrales.
La delegación, compuesta por dos startups de la Región Metropolitana, una de Valparaíso y otra de la Araucanía, tuvo la oportunidad de presentar sus productos exportables. Esta participación fue posible gracias al convenio entre ProChile y CONADI. Entre los participantes se encontraba Cindy Cañupán de la «Distribuidora y Comercializadora Nain Sociedad Limitada» de la Región Metropolitana, una empresaria mapuche que, junto a su hermana Judit, produce calzado artesanal exportado a numerosos países.
Ángelo Quilodrán, representando a «Yoggie Spa» de La Araucanía, mostró cómo su empresa alimentaria mapuche incorpora principios de inocuidad y seguridad alimentaria, así como tendencias de alimentación saludable, todo ello arraigado en los valores mapuches del keyugun o cooperativismo. Su enfoque se centra en la revalorización de materias primas ancestrales, promoviendo la soberanía alimentaria y el comercio justo con comunidades indígenas locales.
Karen Antonopai, de «Mercado Ancestral» en la Región de Valparaíso, destacó su plataforma digital que conecta a artistas y emprendedores de pueblos originarios, en su mayoría mujeres, para difundir y comercializar productos y experiencias de turismo indígena. Este proyecto no solo fomenta la autogestión y el empoderamiento social y económico de sus participantes, sino que también fortalece el diálogo intercultural y la valoración de conocimientos ancestrales.
Antinopai resaltó la importancia del Foro Mundial de Negocios Indígenas como una plataforma global para el encuentro y el crecimiento, inspirándose en ejemplos como el del pueblo Maorí de Nueva Zelanda, que han contribuido significativamente al desarrollo social y económico de sus comunidades. Estos ejemplos motivan a Antinopai a continuar su trabajo de apoyo y crecimiento de otras mujeres indígenas en Chile.
Sebastián Oyarzo, también de la Región Metropolitana, participó en el foro. Licenciado en Lingüística, Gestor Cultural Mapuche y cocinero, Oyarzo se dedica a preservar la cultura Mapuche en contextos urbanos, trabajando por la interculturalidad de los pueblos indígenas en Chile. Su proyecto, Willi Kitral, se centra en productos agroelaborados y gourmet hechos con materias primas de la Agricultura Familiar Campesina, reafirmando la rica herencia de las comunidades indígenas.
Este evento refleja un paso significativo hacia la integración de los pueblos originarios en la esfera global del comercio y la empresarialidad, demostrando el valor de unir la tradición con la innovación y el comercio moderno. La experiencia de estas startups en el foro mundial no solo representa un logro para ellas mismas, sino que también sirve como un modelo inspirador para otras comunidades indígenas que buscan explorar el comercio internacional respetando su identidad y cultura ancestral.