Cobre, la empresa colombiana especializada en tecnología de sistemas financieros interoperables, ha dado un paso crucial en su expansión regional al ingresar al mercado mexicano.
Fundada en 2020 por José Vicente Gedeón, Felipe Gedeón, Alberto Chejne y José Donato, y con casi cinco años de experiencia en Colombia y una plataforma que ha transformado la gestión de tesorería y pagos para más de 200 empresas, Cobre busca replicar su éxito en un mercado cinco veces mayor, adaptando su tecnología a las necesidades y retos únicos del ecosistema financiero de México.
La compañía ha construido una infraestructura propia que ha permitido a las empresas centralizar y optimizar sus operaciones financieras a través de tres productos clave: Movimientos Real Time, Cobre Connect y Pagos Internacionales Inmediatos; infraestructura que ha procesado más de $12 billones de pesos colombianos en transacciones durante el primer semestre del año y reducido en un 90% los tiempos de procesamiento manual para sus aliados, según la compañía.
Una misión transformadora
Desde su fundación en 2020, Cobre ha centrado su misión en resolver los desafíos del movimiento de dinero en el ámbito empresarial. “Nuestra misión es clara: resolver los problemas más complejos del movimiento del dinero, desarrollando tecnología interoperable propia que permita a las empresas crecer y prosperar. Creemos que, al reducir las barreras en la circulación del dinero, impulsamos el potencial económico de toda la región”, dijo en entrevista con Contxto Felipe Gedeón, cofundador de la empresa.
La idea de Cobre empezó a forjarse hace casi 10 años, luego de que en 2014 durante el primer año en la universidad de José Vicente leyera un whitepaper sobre M-PESA, una compañía subsidiaria de Vodafone lanzada en Kenia con Safaricom, el operador móvil del país, la cual permitió a millones de personas enviar dinero en tiempo real a través de mensajes de texto, revolucionando así la economía keniana. “El impacto de la plataforma para facilitar transferencias seguras y accesibles era fascinante”, explica Felipe.
Tras intentar replicar una especie de “M-PESA en Colombia”, pronto identificó un potencial aún mayor: resolver los problemas de movimiento de dinero para las empresas. “Así, nuestro enfoque en Cobre se consolidó en facilitar los pagos y cobros con tecnología propia que resuelve tres grandes dolores: falta de velocidad, exceso de manualidad e inconsistencia de datos en los pagos”, concluye Gedeón al reflexionar sobre los principios que guían a la compañía.
Expansión a México: una decisión estratégica
El mercado mexicano representa una oportunidad significativa para Cobre debido a su tamaño, crecimiento en innovación financiera y su integración económica internacional. A pesar de contar con protocolos públicos de pagos en tiempo real, muchas empresas mexicanas enfrentan los mismos problemas que Cobre identificó en Colombia: falta de velocidad en el movimiento de dinero, excesiva manualidad en los procesos y datos financieros inconsistentes.
“En un mercado más grande, más moderno y con mejor infraestructura financiera, las empresas sufren de los mismos problemas en el movimiento del dinero (falta de velocidad en los pagos, una alta carga de tareas manuales e inconsistencia en los datos financieros). Nos obsesiona resolverlos con tecnología a una escala aún mayor que en Colombia”, explicó Felipe Gedeón, subrayando la preparación específica de la empresa para enfrentar los retos del ecosistema mexicano.
La oferta de Cobre en México se enfoca en dos productos fundamentales. A través de Cobre Connect, las empresas pueden centralizar y automatizar su tesorería, optimizando la gestión de pagos y cobranzas en tiempo real. Este sistema permite a las empresas mexicanas reducir hasta 50 horas al mes en procesos administrativos, lo cual incrementa la eficiencia y asegura consistencia en sus datos financieros.
Por otro lado, con Pagos Internacionales Inmediatos, las empresas pueden realizar transacciones globales en tiempo real, superando las tradicionales barreras de costos y tiempos. Esta solución garantiza que las operaciones internacionales lleguen a su destino sin contratiempos, ofreciendo visibilidad en cada etapa del proceso y mejorando significativamente los tiempos de transacción, al mismo tiempo que optimiza la liquidez de las empresas.
“En Cobre estamos pensando en los retos del mercado Mexicano hace más de dos años. En ese tiempo nos hemos preparado para cumplir con un marco normativo del negocio muy diferente a Colombia (en México ya somos contamos con la Licencia de Transmisor de Dinero) y hemos construido nuevos rieles de movimiento de dinero pensados en ser compatibles con la infraestructura financiera y bancaria mexicana (SPEI, CODI, SPID)”, puntualiza Gedeón.
Impacto en el ecosistema fintech mexicano
La llegada de Cobre a México se enmarca en un contexto de rápido crecimiento del sector fintech en el país, que ha experimentado un incremento del 340% en los últimos seis años. México, como el segundo mercado más grande en innovación financiera en América Latina, ofrece un terreno fértil para que Cobre no solo consolide su presencia, sino que también impulse el ecosistema financiero al ofrecer una infraestructura avanzada de pagos y tesorería para empresas de todos los tamaños.
En modo beta, Cobre ya ha colaborado con una decena de empresas mexicanas desde principios de 2024, y espera cerrar el año con 50 clientes. Además, la empresa se encuentra en proceso de establecer alianzas con instituciones financieras clave en México para que más compañías adopten sus soluciones en los próximos 12 meses.
“Le contamos la noticia al mercado hace un mes tras estar absolutamente convencidos de que el producto está listo para agregar valor diferencial a las empresas que lo usen, y que el equipo de Cobre en México está listo para atender sus necesidades”, explicó Felipe.
Los próximos pasos en la expansión
Cobre ha recaudado 65 millones de dólares en total, con una reciente Serie B de 35 millones liderada por Oak HC/FT, lo cual ha dado un impulso significativo a su expansión en México.
Los recursos serán empleados para seguir robusteciendo su tecnología, expandir su equipo en México y consolidar su infraestructura, asegurando que su plataforma sea lo suficientemente sólida para satisfacer las demandas del dinámico ecosistema financiero mexicano. Felipe Gedeón también indicó que los fondos se destinarán tanto a mejorar la infraestructura tecnológica como a fortalecer la presencia de Cobre en el mercado mexicano: “Nos enfocaremos en desarrollar nuestra tecnología interoperable y en robustecer nuestra infraestructura para asegurar que nuestros clientes cuenten con una plataforma cada vez más sólida y eficiente”.
Con su entrada en México, Cobre refuerza su compromiso de construir un ecosistema financiero más integrado y eficiente en América Latina. La empresa no solo está posicionada en tecnología financiera en Colombia, sino que ahora se establece como un socio estratégico para el crecimiento de las empresas mexicanas, ayudándolas a superar las barreras tradicionales en el movimiento de dinero y facilitando una gestión financiera avanzada y adaptada a sus necesidades locales.