Contxto – Mientras que las protestas contra la austeridad continúan sacudiendo a Chile, una startup con el nombre de Weeshing puede haber comenzado a acostumbrase a estar en problemas. Muchos.
Apenas por debajo de un esquema piramidal, se reporta que la plataforma de inversión chilena para la industria de la música se robó más de US$10,332,463 de un grupo variado de inversionistas confundidos y muy probablemente enojados.
¿Por dónde comenzar? En teoría, tal vez Weeshing era demasiado bueno para ser verdad. Desde el comienzo, la compañía invitó a los usuarios a invertir en conciertos de música, promocionando el potencial de ganancias lucrativas. Con el tiempo, recaudó más de US$10.3 millones entre 17,000 usuarios y 3,000 inversiones, incluso se expandió a México en el proceso.
A pesar de reportes que surgieron hace seis meses sobre estafas, los inversionistas siguen sin saber qué fue lo que pasó con el dinero.
Fraude en la industria de la música
Juan Pablo Duch lanzó Weeshing en 2014, promoviendo las inversiones en conciertos y eventos en vivo. Estas no únicamente tenían el potencial de traer ganancias fuertes para los tiburones más “agresivos”, sino acceso exclusivo a conciertos y shows. Algunos de estos incluían festivales como Roxy, Hellow y Jalo.
Al día de hoy encontrarás grupos en facebook llamados “Weeshing le debe a sus inversionistas,” sin mencionar hilos de Reddit aconsejando a los usuarios mantenerse alejados de la startup. El más reciente de hace seis meses dice:
Weeshing en México
Eventualmente, Weeshing se expandió a México donde Guillermo Padrón dirigió las operaciones hasta que renunció. Según él, Weeshing México tuvo una tasa de crecimiento anual de más del 344 por ciento. Aún más, mantuvo 5,000 usuarios, de los cuales el 85 por ciento eran inversionistas.
Los usuarios incluso invirtieron más de MXN$2.9 millones (alrededor de US$150,000) a través de la plataforma Play Business.
Antes de su partida, Padrón intentó comprar el 55 por ciento de Weeshing México por MXN$300,000 (alrededor de US$15,000), sin éxito. A partir de ahí, al final decidió separarse de la compañía. Mientras tanto, recibió bastantes emails y llamadas telefónicas de inversionistas haciendo una simple pregunta: ¿dónde está mi dinero?
Tras la renuncia de Padrón (donde terminó lanzando Capital Nation para impulsar la industria de entretenimiento en México), Weeshing intentó mantener las operaciones mexicanas a flote. En agosto pasado, el ahora paria promovió oportunidades de inversión para presentaciones de Snoop Dogg en Ciudad de México y Monterrey.
Todo mientras afirmaba un 3 a 15 por ciento en rendimiento variable y 6.6 por ciento en rendimientos fijos, se informa que los shows nunca sucedieron.
Corrupción en Weeshing
Para algunos inversionistas, Weeshing hizo un trabajo excelente escondiendo la realidad de su modelo de negocios.
“Debido a las ganancias ofrecidas, que parecían buenas, aunque no lo suficientemente extraordinarias para levantar sospechas, decidí invertir en la plataforma en un concierto que sucedería en mayo,” dijo el inversionista Alberto Haro a El Economista.
En el futuro, Haro insta a otros inversionistas a que cuenten su historia.
“No es necesario decir, que a pesar de sus muchas promesas, la compañía no regresó el dinero invertido y aparentemente ya desaparecieron del mapa. Espero que muchas de las personas que fueron decepcionadas por esta compañía salgan a la luz y presenten su queja.”
Esta historia continúa desarrollándose. Actualizaremos la información.
-JA
Traducido por Alejandra Rodríguez