Franq, una startup de open banking con sede en Florianópolis, Brasil, levantó US$12 millones en una ronda liderada por el fondo Quona Capital, enfocado en fintechs de mercados emergentes. En la ronda participaron además Globo Ventures, Broadhaven Capital y Valor Capital Group, este último, un VC que se especializa en tender puentes entre Brasil y EEUU y que había liderado la Serie A el año pasado, que fue de US$20 millones.
Creada en 2019, Franq opera poniendo en contacto a “personal bankers” con hasta 50 entidades financieras —bancos como Itaú, Bradesco y Santander, y fintechs como Creditas— para que vendan sus productos a personas y pymes. Según la empresa, tienen alrededor de 7 mil de estos banqueros personales.
De acuerdo al periódico brasileño Valor Econômico, el CEO de Franq, Paulo Silva, un ex ejecutivo de la banca tradicional, se le ocurrió crear la startup porque seguía recibiendo currículums de profesionales del área financiera que buscaban trabajo y, por otra parte, veía una necesidad de personas en busca de productos financieros y asesorías. Según el mismo medio, el 70% de los clientes de Franq son personas naturales, mientras que las empresas representan un %30 de los clientes.
Silva declaró lo siguiente en un comunicado: “Franq se centra en dar a los consumidores más acceso y posibilidades de elección y oportunidades para que los agentes bancarios trabajen de forma independiente. Además de integrar a bancos, fintechs, aseguradoras y brokers en una única plataforma, ofrecemos un soporte completo para que los agentes bancarios puedan emprender con tecnología, formación, contenidos, marketing y asesoramiento contable y apoyo de especialistas en productos”.
De acuerdo a la empresa, el capital se destinará a tecnología y crecimiento de su equipo.