Marketplace Carflix cierra serie A de US$2.7 millones a través de BV Bank

Contxto – Comprar un auto nuevo te da la tranquilidad de que estás adquiriendo un vehículo que está en las mejores condiciones. Comprar uno usado… no tanto. Es por eso que la gente tiene que tener cuidado y conseguir ayuda de amigos, familia o una startup.

Para ayudar a más personas en el mercado de coches usados, la brasileña Carflix cerró una serie A por US$15 millones (~US$2.7 million) en una ronda de inversión liderada por BV bank.

La startup usará estos fondos para el desarrollo tecnológico y el crecimiento de sus operaciones. 

“El negocio de los automóviles usados te pide estar en más de un lugar”, dice Fábio Pinto, cofundador de Carflix. “Es difícil vender un vehículo usado del Salvador a São Paulo”.

Y con justa razón, los potenciales compradores pueden conformarse con cualquier lugar si eso significa un precio razonable por un buen coche. 

Esta no es la primera vez de Carflix, ya que en 2019 había levantado R$2 millones (~US$370,000). 

Porqué es importante: las ventas de autos usados en Latam tienden a ser cara a cara y por lo tanto son muy informales. Eso representa una oportunidad para mejores ofertas o para cometer fraude. Cuando plataformas como Carflix intervienen, le agregan un toque de seguridad a este segmento de mercado que en su mayoría continúa inexplorado.

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Inversión en el marketplace de Carflix

A través de su plataforma, los usuarios pueden comprar un auto usado de manera más segura porque Carflix inspecciona el vehículo y maneja el proceso de negociación antes de que se complete cualquier transacción. Asi les ahorra a los compradores la desagradable sorpresa de ser víctimas de fradue. 

Por el momento, el proceso de inspección de los vehículos de la startup se lleva a cabo en persona: los vendedores solo deben agendar una cita en la plataforma. Sin embargo, para cambiar eso tiene planes tecnológicos bastante interesantes en proceso.

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Carflix le dijo a Exame que está desarrollando software para inspeccionar un auto usando fotos enviadas por el dueño del automovil.

“El cliente toma fotos del auto y se hace un anáñlisis remoto a través de inteligencia artificial”, explicó Pinto.

Esto es importante en términos de escalabilidad porque eliminaría algunas de sus limitaciones geográficas para tener acceso al mercado de autos usados. Además de que también reduciría la necesidad de que el personal vaya en persona a revisar el auto.

Aunque eso viene con la desventaja de tener que convencer a los vendedores y compradores de que confíen en la precisión de su tecnología para detectar inconsistencias o cualquier otra cosa que “pueda estar escondida bajo el capó”.

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-ML

Traducido por Alejandra Rodríguez