Contxto – El gobierno está haciendo todo lo posible por tomar el control, en el caso de Argentina, a partir de diciembre pasado, las transacciones hechas con monedas extranjeras como el dólar estadounidense, tienen un impuesto del treinta por ciento.
Esto ha impactado a muchas startups en todo el país ya que lo deben tomar en cuenta en sus tarifas, lo que obviamente, afecta a los mismos usuarios.
Impuesto del treinta por ciento
La premisa básica es que con cada transacción hecha en un país extranjero, el gobierno cobrará un treinta por ciento del valor de la compra en la moneda extranjera. La tasa de conversión referencial a la que se le cobrará se basará en el valor de esa moneda, el cual es especificado por el banco nacional de Argentina, el día hábil anterior.
Los usuarios verán este impuesto ya convertido a pesos argentinos en sus notas de compra de tarjeta de crédito o débito.
Entonces, por ejemplo, supongamos que un usuario hace un pedido del Resident Evil 3 en Amazon y lo paga con su tarjeta de Ualá. El juego en sí cuesta US$60 y según esa cantidad, el gobierno cobrará su arancel del treinta por ciento. Eso significa unos adicionales US$18.
Luego, estos US$18 se convierten a pesos argentinos al tipo de cambio del día hábil anterior. Este cargo adicional se mostrará en su factura de Ualá, junto con el costo de envío y otros impuestos.
No obstante, se esperan variaciones, ya que las fintech, los bancos digitales y otras instituciones financieras se esfuerzan por ofrecer tipos de cambio más atractivos que la recomendación oficial dada por el banco nacional.
A quiénes afecta
Cualquier aplicación fintech o de pago que maneje monedas extranjeras tenía que encontrar estrategias para abordar esta nueva regulación. Esto resultó en que algunos, como Naranja X, suspendieran temporalmente su servicio para ajustar sus sistemas a la nueva regulación.
Otros, como Ualá, estaban actualizando su aplicación, pero también se tomaron el tiempo para ilustrar cómo se cobraría el impuesto.
Este impuesto de «solidaridad» se estableció inicialmente teniendo en cuenta a los turistas y se aplicará durante los próximos cinco años.
Sin embargo, terminó afectando a los servicios de streaming en el país, como Spotify. Los usuarios no pagan a estas empresas en dólares, pero, los planes de suscripción que venden están originalmente en dólares, se convierten y luego se reflejan en la tarjeta del usuario en la moneda local.
Por lo tanto, mirar Netflix en exceso podría resultar ser mucho más costoso.
-ML
Traducido por Alejandra Rodríguez