Contxto – BASF, una compañía de agrotech, parece estar siguiendo la fórmula de crecimiento estándar de la región. La compañía de químicos alemana recientemente lanzó su fondo de tecnología de US$4 millones en Brasil y ahora saltó el hemisferio hasta México.
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El programa se llama AgroStart, y acelerará y desarrollará proyectos agrícolas innovadores tanto en América Central como en México. Empezó su etapa de reclutamiento en noviembre del 2019, se inscribieron setenta y nueve startups, de las cuales, quince fueron seleccionadas como las ganadoras.
Las startups ahora avanzarán a la segunda etapa del proceso conformado por tres períodos de implementación. Ya pasaron por la primera etapa de AgroStart, incluyendo la sección de lanzamiento y selección. Ahora, continuarán a las siguientes fases de aceleración; estrategias de crecimiento e implementación.
Innovación de raíz
La idea detrás de AgroStart es combinar el espíritu emprendedor de la agricultura con la tecnología para maximizar la producción sostenible y eficiente.
Las startups de tecnología agrícola seleccionadas desarrollarán soluciones en seis categorías clave. Estas subdivisiones abordarán problemas que tienen que ver con la gestión de granjas, por supuesto, pero también explorarán una gama más diversa de retos más tangenciales a la agrotech.
Esto incluirá innovaciones en e-commerce, sistemas de información y robótica. Las diferentes soluciones tecnológicas y técnicas agrícolas se combinarán con los entornos de agricultura vertical y de precisión.
Al final, el mundo sí resultó pequeño
Estas palabras de tecnología de punta esconden una verdad preocupante. Cincuenta años después del inicio de la Revolución Verde, la explosión productiva en técnicas agrícolas del último siglo, el mundo ya necesita soluciones nuevas.
Se espera que la población global alcance los 10,000 millones de personas para el 2050. Aún así, si nada cambia, nuestras tecnologías actuales podrían alimentarlos a todos y más, cuando llegue el momento.
El problema es, prácticamente nada seguirá siendo igual. Será peor.
Tras ser arrasada por incendios forestales, Australia puede atestiguar cómo el cambio climático está poniendo más presión en los recursos agrícolas de nuestro mundo. Desertificación, cultivo excesivo y el deterioro general de los ecosistemas darán como resultado a la disminución masiva de la tierra cultivable.
Por lo tanto, la próxima Revolución Verde, tendrá que hacer más con menos. Ahí es donde iniciativas como AgroStart y las empresas como Wuruwa de Colombia, una startup de “granja a la mesa”, entran en escena.
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Como Iván Rodríguez —jefe de diseño de soluciones digitales en México, América Central y el Caribe— dijo en una conferencia de prensa reciente, “el espíritu de AgroStart se centra en la búsqueda de lograr que la innovación llegue a miles de agricultores mexicanos que, mediante herramientas digitales, podrán tener un mayor rendimiento de sus parcelas existentes”.
La pregunta es: ¿podrán las soluciones agrícolas que el programa de AgroStart quiere crear, estar a la altura de la rapidez con la que estamos cominéndonos a nuestro planeta?
-AG
Traducido por Alejandra Rodríguez