– Microsoft y OpenAI se plantean un centro de datos de 100.000 millones de dólares para el desarrollo de la IA.

  • El proyecto «Stargate» podría convertirse en el más caro, con el objetivo de lanzarlo en 2028
  • El proyecto incluye planes en varias fases con importantes inversiones en chips para servidores de IA

    En una audaz colaboración, Microsoft y OpenAI esbozan un proyecto visionario bautizado como «Stargate», que aspira a erigir un superordenador para la innovación de la IA sin precedentes.

    Con un presupuesto desorbitado de hasta 100.000 millones de dólares, esta iniciativa subraya el compromiso del dúo de encabezar la frontera de la IA, con la ambición de ampliar drásticamente las capacidades informáticas para la investigación y el desarrollo de la IA.

    El centro de datos previsto, con posible sede en EE.UU., estará equipado con millones de chips de servidor, lo que significará un salto en la potencia de cálculo necesaria para el avance de la inteligencia general artificial.

    Las bases de «Stargate» reflejan la inversión estratégica de Microsoft en OpenAI, que supera los 13.000 millones de dólares hasta la fecha, facilitando los esfuerzos de OpenAI como ChatGPT y asegurando el acceso exclusivo de Microsoft a las tecnologías de vanguardia de OpenAI.

    La colaboración prevé la culminación del superordenador para 2030, lo que requerirá gigavatios de potencia y un sólido inventario de chips, con consideraciones sobre el abastecimiento de energía que plantean un reto crítico.

    Esta aventura sin precedentes en la infraestructura de la IA revela una estrategia por fases, con «Stargate» como pináculo de la fase cinco, tras una serie de proyectos de supercomputación progresivamente ambiciosos. Los diálogos actuales apuntan a un posible giro hacia fabricantes de chips alternativos para mitigar la dependencia de Nvidia, impulsada por la escalada de la demanda y los costes.

    En medio de complejidades técnicas y logísticas, como una mayor densidad de GPU y consideraciones sobre la arquitectura de red, «Stargate» promete un salto cuántico en el panorama computacional de la IA, alineándose con las visiones de abordar los retos más desalentadores de la humanidad mediante la superinteligencia.