Conxto – La migración regional es mucha entre los latinoamericanos y caribeños, con alrededor de 28.5 millones de personas que viven fuera de sus países de origen. Con tantas personas que residen en el extranjero, enviar remesas a casa es una práctica estándar entre esta comunidad tan dispersa.
Sin embargo, la realidad de la situación es que a menudo es un proceso complicado o costoso. A veces, una transferencia simple implica un cargo del seis por ciento de la cantidad total que los remitentes deben pagar. Al final, tus amigos o familiares reciben menos de lo que has presupuestado.
De acuerdo con un reporte reciente, la innovación en Fintech y el influjo de la banca móvil en América Latina podrían cambiar esto. El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y Finnovista publicaron recientemente un extenso estudio llamado Fintech en América Latina 2018: Crecimiento y consolidación, que arroja nueva luz sobre el ecosistema financiero de América Latina.
En resumen
En esencia, las iniciativas de fintech podrían hacer que las transferencias bancarias internacionales sean más rentables, por no hablar de reducir molestias.
Basado en un informe complementario del Fondo Monetario Internacional (FMI), los operadores móviles cobran una tasa de comisión promedio del tres por ciento. Esto es mucho más barato en comparación con el seis por ciento de los proveedores financieros tradicionales.
Según la tabla del FMI, podemos ver que el uso de las transferencias de dinero móvil por parte de los latinoamericanos es menor en comparación con otras regiones. Esto puede ser sorprendente si se considera la participación total del área en remesas, lo que equivale a un valor de US$80,500 millones en remesas en 2017. Lo que esto significa es que la inclusión financiera sigue siendo un trabajo en progreso.
A fondo
Las remesas juegan un papel importante en el desarrollo económico de un país. Naciones como El Salvador y Honduras, por ejemplo, dependen en gran medida de estos pagos externos, ya que representan el 15 por ciento de sus PIB.
Afortunadamente, las soluciones de Fintech están creciendo a un ritmo acelerado en la región, con un 61% de crecimiento solo en 2018. Específicamente, el sector representó el 25 por ciento de las inversiones de capital de riesgo en la región en 2017, según LAVCA Trend Watch.
A partir de 2018, también existían 1,166 startups de fintech que operaban en América Latina, según el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y Finnovista. Eso equivale a un aumento del 66 por ciento desde 2017, 463 más para ser precisos.
Mientras más compañías de tecnología financiera colaboren con redes móviles, compañías de transferencia y bancos tradicionales, veremos más mejores. En ese sentido, mejores políticas y las regulaciones más relajadas mejorarán inevitablemente el proceso de envío de remesas para los latinoamericanos.
-JA
Traducido por Alejandra Rodríguez
