Contxto – Hoy ha sido un buen inicio de semana para los entusiastas de la tecnología ocular.
En Las Vegas, Mojo Lens se robó la atención de todos durante el CES 2020, una feria de electrónicos de consumo. El pequeño dispositivo es un lente de contacto que funciona como una pantalla inteligente que te permite superponer información e imágenes sobre lo que ves con tus propios ojos.
Esto es lo que los amantes del la ciencia ficción imaginaron cuando se habló por primera vez sobre la realidad aumentada. Muere de envidia Google Glass.
Más cerca de casa hemos visto el desarrollo de Ojo Vial, una plataforma peruana diseñada para hacer un crowdsourcing de los vehículos mal estacionados.
La aplicación fue creada a mediados del 2019, pero despegó cuando en octubre la adoptaron dos municipios de Lima, Perú. Los gobiernos municipales de San Borja y San Marcos juntos han recibido, desde entonces, cerca de 2,000 notificaciones sobre conductores que se comportan mal.
Queda poco por recorrer
Ojo Vial no es la única aplicación de regulación de tráfico disponible en la región. Ni siquiera es la más exitosa.
Por ejemplo, BA Denuncia Vial de Buenos Aires, que es más vieja, está más expandida, más integral y cumple muchas más infracciones que su contraparte peruana. La plataforma argentina de cinco años de edad, reportó en promedio más de 450 infracciones diarias durante el curso del 2019.
Sin embargo, lo que se destaca de Ojo Vial son sus orígenes inusuales. Aunque la aplicación fue financiada en parte públicamente a través de la agencia de desarrollo de startups de Perú, Innóvate Perú, la plataforma es de hecho de propiedad y de gestión privada.
Esto genera una serie de preguntas filosóficas interesantes y las lleva al reino de los enigmas éticos accionables.
La mente colmena te está vigilando
La privacidad se ha convertido en un problema frecuente a medida que las tecnologías cada vez más invasivas se han vuelto en algo común. A veces se siente que estamos a una decisión mal tomada y a una actualización de software más, de estar en Big Brother.
Entonces, cuando una aplicación deliberadamente coloca al cumplimiento de la ley, aunque sea parcialmente, en las manos de las masas, surgen muchas preguntas muy interesantes. Y cuando la aplicación se usa, no a través de un gobierno electo, sino a través de una entidad privada subcontratada, esas preguntas de repente tienen signos de exclamación.
Temas como la rendición de cuentas, la seguridad y la responsabilidad social con respecto a las empresas versus los gobiernos, deberían ser continuamente discutidas a medida que la tecnología avanza y nos cambia.
¿Prefieres tener a Ojo Vial, BA Denuncia Vial, o a ninguna como parte de tu vida? ¿Es mejor dejar algunas cosas al gobierno o compartirlas colectivamente? Cualquiera que sea tu respuesta, Ojo Vial será un caso de estudio interesante en lo que parece ser un largo debate frente a nosotros.
-AG
Traducido por Alejandra Rodríguez