Contxto – Si alguien que vive en América Latina tiene un problema relacionado con el gobierno, tendrá que pasar por muchos obstáculos burocráticos para poder resolverlo. Por si fuera poco, Covid-19 puso a las oficinas administrativas en aprietos.
El distanciamiento social significa que las personas no pueden estar apretujadas en las salas de espera como dicta su molesto protocolo.
Consecuentemente, los funcionarios se están apresurando a digitalizar muchos procesos. Algunas startups latinoamericanas también están contribuyendo a reducir el exceso de burocracia.
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Ataque fiscal en América Latina
Pandemia o no, tanto las personas como las empresas deben pagar impuestos. La colombiana Tributi y la brasileña Dootax están ayudando a los usuarios a prepararse.
A través de Tributi, por ejemplo, los usuarios responden algunas preguntas, envían los documentos solicitados y luego la startup declara los impuestos en su nombre.
Es un proceso que, según se informa, se puede realizar en dos horas. Además, las personas no tienen que preocuparse si algo sale mal porque Tributi se encarga de todo.
Por ahora solo opera en Colombia, pero la startup quiere lanzarse en Argentina el próximo año.
Dootax, por su parte, automatiza la declaración de impuestos para medianas y grandes empresas en Brasil. Cuando apareció Covid-19, la startup B2B se vio rodeada de empresas que se dieron cuenta de que su dependencia al personal de la oficina para declarar sus impuestos no era práctica y sus operaciones necesitaban un toque de optimización.
Startups que eliminan burocracia
Luego está Docket, una startup brasileña que proporciona un algoritmo para analizar y sintetizar documentos relacionados con bienes raíces (como registros). También les ahorra a quienes buscan una casa la molestia de ir en persona para buscar estos documentos.
“El producto es un centro comercial de documentos. Nos conectamos con ayuntamientos, tribunales, notarios, el Ministerio Público, el IBAMA [el brazo administrativo del Ministerio de Medio Ambiente de Brasil], y hemos reducido el tiempo para obtener documentos hasta en un 80 por ciento ”, dice el cofundador de Docket, Pedro Roso.
Mientras tanto, otra startup brasileña, MOL, adquirió recientemente a una startup de inteligencia artificial para automatizar el procesamiento de quejas de los consumidores.
Una victoria para los equipos legales porque ya no tienen que lidiar con esas tediosas tareas. Del mismo modo, las oficinas gubernamentales tienen menos solicitudes que atender.
Y, por supuesto, Covid-19 también ha fomentado startups que trabajan con firmas electrónicas para oficializar documentos. Para eso pueden confiar en startups como Legalario y Clicksign.
Al final del día, hay un rayo de esperanza en toda esta situación con el Covid. Ahora más que nunca, los usuarios se están conectando con soluciones que compensan la torpeza burocrática.
Aunque algunas tareas conducirán inevitablemente a tratar con funcionarios del gobierno. Solo queda esperar que hayan contraído el virus innovador de las startups para que continúen digitalizando y mejorando sus servicios.
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-ML
Traducido por Alejandra Rodríguez
